El Instante Santo Y Tu Poder En La Toma De Decisiones

En la vida se nos presenta en múltiples circunstancias, algunas de ellas son sencillas, agradables, sin embargo otras se presentan de manera más complicada, con emociones contrapuestas y llenas de confusión.

Cada decisión que tomas procede de lo que crees ser, de tu idea creada en el pasado, y en consecuencia actúas según este patrón. En el pasado aprendiste a definir tus propias necesidades, tus orígenes, tu familia… y decidimos actuar determinados por eso y a separar las cosas que amamos de las que no, según nuestro interés.  Y allí comenzamos a decidir qué cosas y personas amamos , empezamos a diseccionar el todo y a crear la separación con el mundo que nos rodea.

 Y la separación lleva consigo el término de soledad, Sentirnos solos hace realidad la sensación de un mundo separado. Y la soledad nos lleva a sentir la culpabilidad, porque quien se siente solo se siente culpable. Todas estas emociones surgen de nuestro pasado y por tanto forman parte de la interpretación que tenemos de nosotros mismos.

Para este momento, para este instante de lucidez, no importa ni es relevante lo pasado, lo único que importa es tu conciencia presente.

Siéntete libre de limitaciones pasadas pues cada momento es nuevo, Vivir es nacer a cada instante, una nueva oportunidad de Ser lo que quieres ser, de ser honestos y coherentes, y ser la mejor versión de uno mismo. Aquí reside nuestro gran poder de decisión, y esta responsabilidad debe ser recordada a cada instante, en todo momento.

 No temas abandonar por tanto tus imaginadas necesidades ,pues estas solo te entorpecerán el camino. El mundo de la ilusión no puede satisfacer la necesidad que tienes de este instante de lucidez, de sentir la paz . Este instante es tan libre como tú quieras que sea. En este momento eres tan libre como tú quieras ser. Pues en el instante en el que te niegas a estar prisionero, en ese mismo instante se deja de estarlo. En este instante no ocurre nada que no haya estado ahí siempre, lo único que sucede es que se descorre el velo que cubría la realidad, nada ha cambiado, todo está igual. No hay exclusión porque el pasado desaparece y entonces desaparece el concepto de separación.

El Amor no tiene sustitutos, no tiene contrarios, el amor abarca todo.  Cualquier intento de sustituir un amor por otro significa no solo separar,  sino condenar y negarte a ti mismo primero (negártelo a ti mismo) y por tanto a pensar que tus hermanos necesitan ser diferentes de cómo son. En el amor no hay fragmentación, hay aceptación. No puedes amar solo algunas partes de la realidad y entender el significado del Amor, pues Amar es unidad.

Este instante es tan libre como tú quieras que sea. 

En este momento eres tan libre como tú quieras ser. Soy libre, soy libre, soy libre…